El baño es una de las zonas donde debemos tener
especial cuidado y esmero con la limpieza; además, es una zona en la cual
podemos encontrar materiales o superficies a limpiar que requieren de pautas
especiales. Hoy os damos diversos consejos para no solamente llevar a cabo una
correcta limpieza del aseo, sino además hacerlo más rápido y de una forma más
eficiente.
1. Prepara
la zona: antes de ponerte manos a la
obra, retira objetos pequeños y medianos que puedan encontrarse en el suelo
(taburetes, papeleras, etc.) o sobre superficies (jabón, vasos, elementos
decorativos, etc.
2. Empieza
por el lavamanos, la bañera y el inodoro: son los elementos con más uso dentro del baño, y a los cuales sin
duda debemos darles un plus de limpieza. Rocía tus productos de limpieza sobre
toda la superficie y déjalos actuar al menos un minuto antes de pasar un paño
humedecido con agua.
3. Elige
los productos adecuados y úsalos correctamente: con la inmensa variedad de productos de
limpieza que se encuentran actualmente en el mercado, puede parecer todo un
mundo encontrar el que realmente sea el adecuado para tu baño. Lo mejor es que
preguntes a un profesional sobre qué producto es el más adecuado para tu baño;
si tú también tienes dudas sobre los productos que mejor cuidarán tu baño,
¡puedes preguntarnos!
4. Las
cortinas de ducha: si usas
cortinas en lugar de mampara en tu ducha, es muy importante lavarlas
regularmente para mantener una correcta higiene. Es recomendable pasarlas por
la lavadora cada poco, y para mantener la limpieza, puedes pasarles por toda la
superficie un trapo empapado en salmuera, dejarlo actuar durante 15 minutos y,
tras ello, aclarar con abundante agua.
5. No te
olvides de los azulejos: al
formar parte de la pared del baño, mucha gente pasa por alto la limpieza de los
azulejos. No obstante, debemos limpiarlos al menos mensualmente de forma
completa para mantener la limpieza general del baño.
6. Otros
elementos: una vez terminados los
anteriores pasos, es el turno de otros elementos como espejos, estanterías,
muebles de baño, etc.
7. Por
último, el suelo: ¡No nos
íbamos a olvidar de esta parte tan importante! Una vez tengamos el resto de
elementos impecables, es momento de dar el repaso final al suelo, barriendo y
fregando.
8. Mantenimiento: ¡no hay mejor limpieza que no ensuciar!
Evidentemente es normal que con el uso del baño se ensucie, pero si mantienes
poco a poco la limpieza (pasar abundante agua tras usar la ducha o el
lavamanos, eliminar pequeños restos de jabón, procurar no salpicar el espejo,
etc.) verás que el momento de limpiar a fondo esta zona de la casa se te hace
mucho más rápido.
Y tú, ¿tienes en cuenta todos estos pasos para
limpiar tu baño? ¡Cuéntanoslo en los comentarios!